El actual pueblo medieval de Sant Martí d’Empúries (Girona), fue el primer asentamiento de los griegos foceos que dio lugar a la creación de la Empúries griega. Al final, sede del condado de Empúries.
Sant Martí d’Empúries (Girona)
Sant Martí d’Empúries. Alt Empordà. Girona
Municipio: L’Escala. Comarca: Alt Empordà. Provincia: Girona. Com. Autónoma: Cataluña
Coordenadas: 42°08′00″N 3°07′00″E. Altitud: 14 msnm. Población: 40 habitantes (2019)
Web: ajuntament
Visita: 2019
Sant Martí d’Empúries. Alt Empordà. Girona
Enlace con el Post: Ciudad greco-romana de Empúries
Una vez terminado el recorrido por el yacimiento arqueológico de Empúries, después de visitar el Museo, la segunda ciudad griega -la Neàpolis, y la ciudad romana Emporiae, completo la visita al que fue primero y último núcleo de población del proceso histórico de ocupación de Empúries.
Me dirijo al lugar donde se asentaron los griegos foceos a su llegada a este territorio, en el siglo VI a.C., en la Palaiápolis griega, y donde, muchos siglos después, acabaron los últimos asentamientos en la colina de Sant Martí d’Empúries, como sede condal y episcopal, en el siglo XI, y plaza militar, con las murallas reconstruidas en el siglo XV.
De primera ciudad griega a villa medieval
En el exterior norte del recinto arqueológico que presenté en el Post: Ciudad greco-romana de Empúries, ya dije que aquí se situaba la Palaiápolis o primer establecimiento griego y que, tras la decadencia y abandono de la ciudad romana terminó siendo el último asentamiento medieval y la actual Sant Martí d’Empúries.
En un largo proceso geomorfológico, primero debía ser una colina en forma de isleta, posteriormente una estructura de morfología peninsular a medida que avanzaba la sedimentación marina, hasta la actualidad, en que la progresiva sedimentación a lo largo de la costa la ha convertido en un pequeño cabo marítimo.
Al recorrer Sant Martí d’Empúries podemos captar sus dimensiones, que habrán sido siempre las mismas dadas las limitaciones del territorio disponible. Pero también nos podremos hacer una idea de las dimensiones del puerto grecorromano, si imaginamos la forma de bahía que tuvo en aquellos momentos, y que representé en una de las figuras iniciales de aquel Post.
Recorrido por Sant Martí d’Empúries
Sant Martí d’Empúries es un encantador pueblo medieval con un marcado reconocimiento turístico.
Los griegos foceos llegaron en el siglo VI a.C. En ese momento parece ser que era una isla separada por el estuario del río.
Fue su Episcopal entre los años 516 y 693. Carlomagno nombró primer Conde de Ampurias a Ermerguer el 812.
Sabemos que de la ciudad griega no quedan prácticamente rastros arqueológicos y que lo que se conserva corresponde a la estructura medieval donde fueron a vivir inicialmente los condes de Empúries, como primera capital del Condado, y se instauró la sede episcopal.
El 1468 la Villa fue sitiada y devastada por el Duque de Lorena, reconstruyéndose posteriormente la Iglesia y las defensas.
La estructura urbana es de forma cuadrangular y defendida por murallas desde siempre. Se conservan gran parte de estas murallas.
Se entra por la calle Major hasta la plaza Major.
Dominando la plaza Major está situada la Iglesia Parroquial de Sant Martí. Se sabe de la existencia de una iglesia prerrománica o románica en 842. Probablemente esta primera iglesia cristiana se levantó sobre el templo de Artemis de Efeso.
Fue restaurada dos veces, como consta de las lápidas de la fachada, los años 926 y 1248. Después de la destrucción por parte del Duque de Lorena, en 1507 se inició la reconstrucción de la iglesia en estilo gótico-tardío, acabada en 1538.
Destaca la forma cuadrada de la fachada, con una espadaña que ocupa tora la anchura con cuatro campanas. La portada de arco apuntado y un rosetón con círculos lobulados.
La planta es de una sola nave con ábside poligonal.
Junto a la Iglesia y sobre las murallas, se alza el edificio modernista Casa del Servicio Forestal, del año 1910, atribuida al ingeniero forestal José Reig Palau.
En el extremo sureste, dominante sobre el puerto, se elevaba el castillo, del que quedan muy pocos restos.
El mirador fuera muralla permite ver toda la extensión del ámbito del puerto, con el espigón al fondo a la izquierda. Ahora es cuando podemos imaginar las dimensiones del conjunto portuario si hacemos llegar el agua del mar hasta ocupar parte del pinar.
Hacia el norte la playa de Sant Martí d’Empúries sobre el golfo de Roses.
El tramo de muralla sur, y la Iglesia gótica sobre la muralla con el ábside a levante.
Desde la plaza Mayor sigo alternativamente las dos calles de la parte norte.
La calle del Corral.
Y la calle Francesa, que lleva a la punta noroeste de la muralla, que conserva parte de su estructura y el pozo.
Tomo la única calle que me quedaba por recorrer, la calle del Pou, hasta la puerta de la muralla.
Se conserva todo el lienzo de la muralla norte, con una pequeña puerta de acceso.
En la muralla occidental estaba situada la portada principal, defendida por matacán.
Fin de la visita
Con el Post de la Ciudad greco-romana de Empúries y este de Sant Martí d’Empúries, disponemos de una visión completa de los asentamientos que desde el siglo IV a.C. hasta el siglo XV d.C. giraron alrededor de Empúries.
Creo que esta inmersión en el devenir histórico continuado de un territorio es de un valor excepcional. Sobre todo, teniendo en cuenta que no ha sido reedificado. Arranca en la edad del bronce, pero lo más trascendente fue el siglo IV a.C., con la llegada de los griegos foceos, y termina en la Edad Media, al ser sede condal y episcopal y plaza militar amurallada.
A pesar del paréntesis posterior, asume una continuidad con la valorización cultural de principios del siglo XX y la innegable importancia turística desde la segunda mitad del siglo XX, con intensa continuidad actual.
Basta pasearse -o cena- por la plaza Mayor de Sant Martí d’Empúries cualquier noche de verano para comprobar su atractivo turístico.