Teruel, la capital de provincia con menos población de España, es una caja de sorpresas. De estructura urbana medieval, cuenta con un importante legado mudéjar y modernista, sobre una base de 250 millones de años en Dinópolis.
Un día en Teruel
Un día en Teruel
Teruel. Comarca: Comunidad de Teruel. Provincia: Teruel. Com. Autónoma: Aragón
Coordenadas: 40°20′37″N 1°06′26″O. Altitud: 915 msnm. Población: 35.484 habitantes (2017)
Web: Ayuntamiento
Visita: 2018
Índice
Un día en Teruel
Hoy pasaré un día en la ciudad de Teruel, capital de la provincia más meridional de la Comunidad Autónoma de Aragón, al sur del sistema Ibérico, a una altitud media de 915 m.
Aunque hay vestigios más antiguos, el Teruel actual parte del año 1171 cuando es reconquistada por Alfonso II de Aragón y la traslada a su ubicación actual. Para potenciar el repoblamiento se le concedieron fueros y privilegios, manteniendo una amplia convivencia entre cristianos, judíos y mudéjares.
El origen estratégico-militar de la localización de la ciudad
La ciudad de Teruel nace para la historia en el tercio final del siglo XII, en una encrucijada de pasos fronterizos entre el reino cristiano de Aragón y el reino musulmán de Valencia.
Es una puebla, dotada de Fueros y asentada en un área de atormentada geografía en lo alto de una muela. Con una trama reticulada de calles se rodea y amplia un núcleo preexistente de población árabe, que aparee ya citado con este mismo nombre de Teruel hacia el 1092, en el Poema del Cid. En la ubicación y las trazas de este poblamiento se halla la clave de su paisaje urbano y de sus valores ambientales. La instalación de la ciudad por razones estratégicas en lo alto de una «muela» rodeada de barrancos, proporciona una «visión dramática» de sus áreas de borde. Ya en el interior del núcleo urbano la singular ubicación de las Torres mudéjares en función de la defensa y control de su paisaje, caracterizado por una serie de secuencias y líneas de aproximación, a lo largo de ejes formados por calles y plazas, cuyo arranque o remate final siempre es una torre mudéjar.
A partir de su fundación la ciudad cristiana se organiza en nueve parroquias, cada una de ellas encargada de la vigilancia y control de un área urbana, con obligación de crear una torre de vigilancia y mantener vigías. Estas primitivas torres de vela marcan las pautas para el trazado reticular de calles.
A mediados del siglo XIV, cuando la ciudad de Teruel es declarada ciudad, aparece ya consolidada la trama urbana dentro del recinto amurallado que encierra la planicie superior de la muela.
Con el avance de la frontera, Teruel se transforma de ciudad militar a ciudad mercantil y, aunque en menor grado, en ciudad fabril.
Con el siglo XV comienza una serie de crisis, seguidas de períodos de estabilidad o desarrollo. A comienzos del siglo XVIII la ciudad aún no ha desbordado sus muros.
El comienzo del siglo XIX supone para todas las ciudades del interior el inicio de una crisis económica a raíz del hundimiento de la industria tradicional, agravada por las guerras napoleónicas. A mitad del XIX, la concesión de la capitalidad provincial inicia un lento proceso de recuperación, acompañado de importantes reformas urbanas y se empieza a derribar la muralla.
En el año 1936, con motivo de la guerra interior española, Teruel recupera su inicial carácter de encrucijada estratégico-militar. Tras tres años de combates y bombardeos, la tercera parte de sus edificios quedó reducida a escombros, y otro tercio sufrió grandes daños
Los años siguientes se producirán reformas muy importantes, hasta llegar a la ciudad actual.
En la actualidad, con 35.484 habitantes (2017), es la capital de provincia con menor número de habitantes y con tendencia decreciente.
Los servicios y el turismo, y en menor grado la industria agroalimentaria y la auxiliar del automóvil, conforman la base económica del municipio. Vuelve a perder su papel estratégico y queda alejada de los ejes de comunicaciones y de desarrollo fundamentales de la Península. De hecho, sólo tiene comunicación directa dentro del eje Zaragoza-Valencia.
Esta situación marginal es que ha llevado al eslogan reivindicativo de su marginalidad en forma de «Teruel también existe«.
La visita a la ciudad
La ciudad de Teruel, y su entorno, merecen una visita para disfrutar de una ciudad tranquila y con atractivos arquitectónicos muy particulares.
La estancia se puede completar con una visita a Dinópolis, parque temático paleontológico con sede en Teruel capital (a unos 3 km del centro de la ciudad) y otros siete museos ubicados en otras tantas localidades de la provincia.
La presentación que haré a continuación no seguirá un itinerario urbano continuo, sino que señalaré los lugares de visita por estilos arquitectónicos para intentar dar una cierta coherencia al discurso.
La proximidad entre unas y otras edificaciones no hará difícil su seguimiento con un plano turístico básico.
Arquitectura mudéjar
La arquitectura mudéjar aporta el componente arquitectónico más importante del contenido de la ciudad y lo que le ha llevado a formar parte de la consideración de Patrimonio de la UNESCO.
El papel de los mudéjares fue esencial en el desarrollo de la arquitectura mudéjar como síntesis o fusión entre las arquitecturas cristianas románica y gótica, y la musulmana de encajes de ladrillos del mundo taifa y almohade. El resultado fue un modelo arquitectónico exclusivo de ciertas zonas de la Península Ibérica en el proceso de reconquista (sobre todo en las Castillas y Aragón). Su especificidad es la que justificó, como decía, la consideración del mudéjar de Aragón como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1986.
El origen histórico-social del mudéjar hay que buscarlo en el avance de la reconquista leonesa, castellana y aragonesa que supuso la incorporación de territorios con población musulmana que permaneció en el lugar, y que aportaron su saber en el campo de diversas artes en la construcción de templos cristianos a partir del siglo XII.
En esencia se trata de edificaciones que siguen el patrón de la arquitectura románica o gótica pero utilizando el ladrillo en sustitución de la piedra tallada.
En el caso del mudéjar aragonés aporta como elementos originales una decoración mural exterior más compleja de ladrillos formado dibujos, la incorporación de cerámica vidriada en forma de baldosas, platos circulares y fustes de las columnas, en colores blanco, verde y rosado.
El hecho singular es que se trata de obras religiosas cristianas construidas por musulmanes.
Efectuaré una breve descripción siguiendo el orden del momento de su construcción en los siglos XIII y XIV.
Torre campanario del siglo XIII e iglesia de San Pedro (A)
La torre de San Pedro es de planta rectangular. Responde al modelo de torre-puerta. Es obra del siglo XIII y forma parte del conjunto mudéjar reconocido por la UNESCO.
De su decoración exterior destaca el ábside, de siete lados, decorado con franjas de arcos mixtilíneos e incrustaciones cerámicas. Sobre su cubierta encontramos seis torretas de planta octogonal, decoradas con cerámica estrellada.
Como rasgo singular del mudéjar aragonés, posee un ándito que rodea la nave y el ábside, como un camino de ronda.
La Iglesia de San Pedro se construyó a lo largo del siglo XIV y su estructura es de una sola nave con capillas laterales.
El interior del templo fue decorado entre 1896 y 1902 en estilo modernista neomudéjar por Pablo Monguió Segura y el artista plástico Salvador Gisbert.
El retablo del altar mayor es de estilo renacentista, de madera de pino tallada sin policromar, obra del escultor Gabriel Yoly (o Joli), al igual que el retablo policromado del altar de los Santos Médicos.
Dispone de un claustro mudéjar de planta cuadrada y altas arcadas.
Torre campanario de la Catedral de Santa María de Mediavilla del siglo XIII (B)
Elevada a Catedral en 1587, actualmente es el templo más importante de la ciudad de Teruel y uno de los más significativos edificios aragoneses de construcción mudéjar. Conserva elementos tan importantes de este estilo artístico como la torre, el cimborrio y la techumbre, incluidas en el catálogo del Patrimonio Mundial por la UNESCO. Otro de los elementos importantes considerado dentro del catálogo es el artesonado mudéjar en madera de la Catedral.
Dentro de la serie de ampliaciones y reformas que se han ido sucediendo en la Catedral a lo largo del tiempo, la última de importancia corresponde a la portada sur. Es obra del arquitecto Pablo Monguió, realizada en estilo neomudéjar en 1909. El diseño de la portada en un estilo del pasado responde a la idea del autor de integrar la nueva obra en el conjunto del templo, cuya construcción responde mayoritariamente al estilo mudéjar. Por eso tomó básicamente como modelo elementos decorativos de la torre.
Torre campanario de la iglesia de San Salvador del siglo XIV ( C )
Su construcción data del primer cuarto del siglo XIV. Es una torre mudéjar, de planta cuadrada, que al igual que la de San Martín, presenta una estructura minarete-almohade, una doble torre.
Como es habitual en la mayoría de las torres de Teruel, la de El Salvador ofrece también la característica de ser una torre-puerta, permitiendo el paso del trazado viario. La decoración de la torre de El Salvador es la más rica de las torres de Teruel, con frisos de arcos mixtilíneos entrecruzados y frisos de lazos de cuadro octogonal.
Adosada a la torre encontramos la Iglesia del Salvador, la construcción que ha llegado a la actualidad corresponde al último tercio de siglo XVII.
Torre campanario de la iglesia de San Martín del siglo XIV (D)
Muy similar a la de El Salvador, muestra una gran riqueza decorativa. También, de acuerdo con su función, es una torre-puerta. Muestra características góticas.
Del Renacimiento al siglo XIX
El Palacio de la Casa de la Comunidad (Museo Provincial) (E) es uno de los ejemplos más importantes de arquitectura civil del siglo XVI en Teruel. Es de estilo renacentista avanzado de finales del siglo XVI. La fachada está formada por tres cuerpos y, en la parte superior, tiene una galería corrida bajo el alero y se remata con una arquería con columnas. Es sede del Museo de Teruel desde 1987.
Acueducto de Los Arcos o Traída de las Aguas de Teruel (F) es a la vez un viaducto ya que los pilares del segundo cuerpo están abiertos al tráfico peatonal para facilitar el tránsito sobre el gran barranco que separa la ciudad del arrabal. Está considerada una de las obras de ingeniería más relevantes del Renacimiento Español.
Su construcción comenzó en 1537 captando el agua de la Peña del Macho, y retomada en 1551 por el ingeniero francés Quinto Pierres Vedel. Este puente salva el desnivel entre el Teruel medieval y el moderno. Consta de dos niveles, el superior de seis arcos y la inferior de dos.
Del siglo XVII podemos apreciar el Convento de Las Claras (G).
El Edificio del Ayuntamiento (H), fue construido a mediados del siglo XIX. Al lado se puede ver la casa del Dean de la Catedral, del siglo XVI, junto a la Torre de la Catedral.
Modernismo y arquitectura neomudéjar
En torno a la Plaza del Torico, se concentra el espacio comercial y de Servicios de la ciudad con grandes edificios modernistas restaurados,
La Fuente del Torico (I) es del año 1858, y en lo alto de su columna de piedra tenemos una estrella y un pequeño toro en bronce, símbolos de la ciudad.
El Modernismo, o neomudejar como algunos lo denominan en Teruel, es algo particular de la ciudad con respecto al resto de Aragón y se da por la unión de tres elementos que se complementaron a la perfección: el poder económico de la burguesía de finales del siglo XIX, la capacidad del arquitecto Pablo Monguió y la excelencia de los artesanos de la ciudad.
Para poner en valor este patrimonio modernista de Teruel, coincidiendo con el tercer sábado de noviembre, se celebra una Fiesta Modernista vinculada a esta época que vivió la ciudad, recreando personajes y costumbres turolenses de principios del siglo XX.
Pablo Monguió, nacido en Tarragona en 1865, desarrolló una espléndida trayectoria en Teruel, de la que era arquitecto municipal, siendo reconocido como el arquitecto por excelencia del modernismo turolense.
La primera de sus construcciones que podemos apreciar está situada en la céntrica Plaza del Torico. Se trata de la Casa de Tejidos El Torico (J), construida en 1912. El nombre lo conserva del comercio que originariamente existía en su planta baja. Fue declarada Bien de Interés Cultural en 2006.
A pocos metros, en la calle Nueva, se hace visible La Casa Ferrán (K) construida en 1910, obra també de Pablo Monguió. Se la considera el perfecto exponente del modernismo turolense y una de las obras cumbres del arquitecto. La piedra, el hierro forjado y la madera con que está construida forman una magistral unión de asimetría y equilibrio. Fue declarada Bien de Interés Cultural en 2006.
Un tercer edificio de Montguió es el Archivo Histórico Provincial, o Escuelas del Arrabal (L), de estilo modernista con influencias neomudéjares. Se construyó como colegio en 1912 y, tras su rehabilitación, es desde 1987 la sede del Archivo Histórico Provincial.
Si nos situamos en el Paseo del Óvalo nos encontraremos en el límite de la «muela» sobre la que está construida la ciudad. Para salvar el desnivel existente entre la Estación del Ferrocarril Central de Aragón y el casco antiguo de la ciudad, a comienzo de los años veinte (entre 1920 y 1921), se encargó a José Torán de la Rad la construcción de una Escalinata (M), que fue declarada Bien de Interés Cultural el 2008. En ella se manifiestan elementos arquitectónicos y decorativos extraídos de la tradición mudéjar local y del modernismo, y se la considera obra clave del neo-mudéjar turolense.
Otra obra neomudejar destacada es el Edificio de Correos (N), de 1930, en la calle Yagüe de Salas. Se trata de un edificio neomudéjar de tres plantas, construido en ladrillo rojizo, zócalo de mampostería, puerta principal, laterales de servicio y grandes ventanales de arco de medio punto y singular alero de madera con decoración a base de azulejos. La autoría del proyecto se atribuye al arquitecto Antonio Rubio Marín.
Los amantes de Teruel
Por fin, hablaremos de los Amantes de Teruel (A). En un anexo de la Iglesia de San Pedro, se ha construido un mausoleo con las dos tumbas de estos personajes de leyenda. Los dos sarcófagos son obra de Juan de Ávalos. Más que el valor artístico, aquí cuenta el valor romántico-sentimental y de arraigo histórico de la leyenda dentro de la ciudad de Teruel, y de visita obligada.
En la práctica, su sala es el lugar de encuentro para iniciar la visita guiada (la única forma de poder visitar) en la Iglesia y torre de San Pedro. Aunque se han escrito varias obras sobre este suceso, la obra canónica es la de Juan Eugenio Hartzenburg Los amantes de Teruel (1837), un drama romántico en prosa y verso.
Para el enrejado inferior de cada sarcófago se pueden ver los esqueletos de las dos personas que son consideradas los amantes, Isabel de Segura y Juan Martínez de Marcilla (también identificado como Diego de Marcilla) que les sitúa en el siglo XIII.
Para mantener la tradición y potenciar el turismo, cada año se representan Las Bodas de Isabel de Segura en Teruel en forma de fiesta medieval; generalmente se desarrolla todos los años el tercer fin de semana de Febrero.
Dinópolis y el Museo Paleontológico de Teruel
Como he dicho antes, el complemento en la estancia en Teruel puede ser visitar Dinópolis que combina un parque temático de ocio sobre los dinosaurios con el Museo Paleontológico de Teruel.
Fin de la visita
La parte histórica de Teruel es una ciudad tranquila y agradable para pasear y sumergirse en sus callejones, para tomar unas tapas o comer en ella. También se pueden visitar museos como del Museo de Arte Sacro o el Museo Provincial.
Pienso que el «Teruel también existe» es una proclama que deberíamos hacer caso para ir y disfrutar. La ciudad lo merece, y el entorno, como la Sierra de Albarracín, es uno de los lugares a admirar de la Península.
Bases de información
Webs
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Patrimonio cultural
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Mudejar
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Modernismo y neomudéjar
Turoliense, artnoveau, turismoteruel
Dinopolis
Webs Academic
María del Carmen Lacarra Ducay (Coord.), Arte mudéjar en Aragón, León, Castilla, Extremadura y Andalucía
José Galiay, Arte Mudéjar Aragonés
Urbanismo: Plan especial del Centro histórico de Teruel