Entre los años 40 y 70 del siglo pasado se crearon 14 Pueblos de Colonización en Vegas Bajas del Guadiana. Conocer el particular urbanismo del Plan Badajoz es el objetivo de esta ruta.
Pueblos de Colonización del Plan Badajoz
Pueblos de Colonización del Plan Badajoz. Vegas Bajas del Guadiana. Badajoz
Ámbito territorial: Vegas Altas y Vegas Bajas del Guadiana. Provincia: Badajoz. Com. Autónoma: Extremadura
Visita: 2019
Pueblos de Colonización del Plan Badajoz. Vegas Bajas del Guadiana. Badajoz
Enlace con el Post: Cerro Príncipe. Hotel Rural-Restaurante. Tierra de Mérida–Vegas Bajas
Uno de los objetivos de la estancia en Cerro Príncipe era acercarme a observar la situación actual de la actuación que, en la segunda mitad el siglo pasado, se desarrolló en Extremadura conocida popularmente con el nombre de Plan Badajoz y, concretamente, de los pueblos de colonización que se crearon ex novo dentro del Plan.
La localización de Cerro Príncipe en el municipio de La Garrovilla era perfecta, por tratarse del primer pueblo afectado por el Plan, aun cuando era un pueblo preexistente no afectado por la colonización. Esta posición me situaba territorialmente en el extremo oriental de la zona de las Vegas Bajas, tomando como referencia la ciudad de Mérida, situada en el centro del Plan, y abarcando la mitad del territorio global de actuación.
Aunque estos poblados puedan salirse de lo que podría considerarse un turismo canónico, desde mi punto de vista representan un momento concreto de la historia, tan interesante de conocer como pueda serlo un pueblo medieval, por poner un caso. Se trata de actuaciones que corresponden a un momento de la historia, aunque sea de la cercana segunda mitad del siglo XX, y que reflejan un modelo de urbanismo propio y específico vinculado a un modelo de reforma agraria. Son lugares con historia, y con una historia propia, aunque no se les considere pueblos históricos.
Como veremos, es una historia que explica como se forma un pueblo realmente nuevo, sobre la base de una afluencia de personas de otros lugares, para apropiarse de un territorio, reconvertir su estructura productiva de una agricultura de secano a una de regadío, y llegar a formar comunidad sobre la base del desarraigo de todos los primeros habitantes o colonos.
Ello se hizo sobre un modelo urbanístico específico, e implantando una estructura agraria de pequeñas explotaciones frente al latifundismo, y pasando de una agricultura tradicional de secano a una intensiva de regadío.
Son cambios muy importantes en las formas culturales que debieron asumir los “colonos” junto a la construcción de una nueva identidad local al crearse unas entidades de población de gente de procedencia diversa, aunque de poblaciones próximas, pero que no se conocían, o solo se conocían los que pudieran proceder del mismo pueblo, y que deben aprender a convivir con el resto de la noche a la mañana.
Con todo, no olvido que estoy haciendo turismo cultural, no trabajo de campo académico, porque necesariamente solo observaré la superficie de la realidad territorial. De hecho, es lo mismo que cuando visito pueblos con arte e historia.
Un poco de historia
Debemos remontarnos a 1902 cuando se elabora un primer Plan General de Canales de Riego y Pantanos, basado en las ideas regeneracionistas de Joaquín Costa de mediados del siglo XIX, conocido como “Plan Gasset”. De las 205 obras que propone, 22 se encuentran situadas en Extremadura.
Puede decirse, según Sánchez Sánchez-Mora, “que la práctica totalidad de las actuaciones que, medio siglo más tarde, llevó a cabo o finalizó el régimen de Franco y que constituyen el afamado Plan Badajoz (…), habían sido concebidas muchos años antes.”
En años posteriores se continua en esta línea, con la promulgación en 1933 del Plan Nacional de Obras Hidráulicas.
En 1939 se crea el Instituto Nacional de Colonización (INC) y una ley de Colonización de Grandes Zonas, con escaso éxito, mientras que en 1940 se reanuda este camino de las obras hidráulicas con al Plan de Obras Hidráulicas orientado al regadío.
Será en 1949, por la ley de Grandes Zonas Regables que se inicien los grandes procesos de actuación que, en nuestro caso se plasman en 1952 en el Plan Badajoz, el nombre con el que se conocerá popularmente el Plan de obras hidráulicas, colonización, industrialización y electrificación de la provincia de Badajoz.
El Plan Badajoz promovió, entre otros objetivos, la regulación y aprovechamiento del río Guadiana, la transformación de las tierras de secano en parcelas de regadío, la construcción de caminos y carreteras y la creación de poblados de colonización, y la producción de energía hidroeléctrica.
Infraestructura hidráulica: La regulación del río Guadiana
El primer problema a resolver fue la regulación y el almacenamiento de los recursos hídricos del río Guadiana. Sin esta regulación previa sería imposible su aprovechamiento dado su elevado estiaje de estacionalidad muy acusada, y la provocación de grandes crecidas inundables.
Para resolver esta problemática se construyeron 9 embalses en la cuenca del Guadiana. Los 4 más importantes en la cabecera de las tierras del Plan, en las Vegas Altas, fueron los embalses de Cijara, de García, de Orellana y del Zujar. Y uno regulador intermedio en la cabeza de las tierras de la Vega Baja, el embalse de Montijo. Representados con puntos azules en el mapa.
Los canales principales construidos superan los 300 kilómetros de longitud, además de acequias y tuberías.
Con esta infraestructura hidráulica se cubría una superficie regable de 110.000 hectáreas.
Todo ello realizado en un periodo de unos 23 años.
Infraestructura agraria y de colonización
El objetivo final era la redistribución de la propiedad de la tierra sobre la base de unos colonos a los que se les dotaba de forma provisional de una parcela de riego y una vivienda en un poblado de colonización de nueva creación distribuidos por toda el área del Plan. Se trataba de unidades familiares de producción que además recibían una yunta de bueyes o mulas, una vaca de leche i aperos. Además, recibían una formación de tres meses sobre agricultura de regadío.
Se estableció un sistema de retorno y amortización del capital recibido y de pago de las tierras y de la vivienda. Las parcelas entregadas tenían una superficie entre 3,5 y 6 hectáreas. Con la evolución de la mecanización su dimensión ha resultado insuficiente, y se le considera un problema para estos poblados. Durante 5 años el colono era tutelado y se le marcaba lo que debía producir. Me explican que se dieron casos de colonos expulsados por no alcanzar las producciones asignadas.
Aunque a veces se habla de que fue un proceso de expropiación de hecho las tierras expropiadas a los grandes propietarios fueron fincas compradas de forma parcial, hay quien dice que a muy buen precio.
La planificación de los poblados corrió a cargo del Instituto Nacional de Colonización (INC), (creado en 1939 y disuelto en 1971), bajo unos criterios establecidos por el INC, adaptado a la dimensión de cada poblado.
En la elección de los futuros colonos se siguieron criterios políticos y religiosos. Se estaba en época del nacional-catolicismo.
Una persona me decía: “El ingeniero (agrónomo) y el cura eran los amos del pueblo”.
Urbanismo y tipología de vivienda rural
La valoración que se hace en la actualidad del urbanismo de estos poblados es de que los jóvenes arquitectos que los diseñaron usaron el lenguaje del movimiento moderno y descubrieron el racionalismo que buscaban, siempre con respeto por lo popular y adaptándose a las circunstancias topográficas, climatológicas, y con unos recursos limitados.
Otro tema interesante, y del que aquí solo se puede ver su aspecto externo, se refiere a la arquitectura de la casa rural que se promovió.
Como modelo de referencia, los poblados disponen de una zona central en forma de plaza que reúne los edificios administrativos, religiosos y de servicios, lo que podríamos llamar el centro cívico, en muchos poblados era la Plaza de España. El campanario de la Iglesia se constituye como el elemento visual dominante del poblado. La planimetría del poblado va desde la puramente ortogonal a la radial, pasando por modelos mixtos, a veces debido a adaptaciones al terreno.
Las casas están dispuestas en manzanas siempre de forma individual y adosada.
La parcela de la casa se encuentra ente los 450 y 600 m2 y la vivienda ocupa unos 60 m2, a uno o dos niveles. Un portalón, en la fachada o en la parte posterior de la casa, permite el acceso del carro, y posteriormente tractor, y de los animales al corral.
Recorrido por los poblados de colonización
En el periodo de 1949 a 1970, entre Mérida y Badajoz, se crearon 14 pueblos de colonización, de dimensiones distintas, que en 2018 estaban comprendidas entre 247 y 2.734 habitantes.
De estos visité 7, que son los que presento a continuación. Pero también aprovecharé las opciones que ofrece Google earth, para mostrar la planimetría urbana de los 7 restantes.
Primero es interesante que nos acerquemos a la Presa de Montijo como el embalse regulador de la zona oeste del Plan Badajoz.
Embalse de Montijo
El Embalse de Montijo (A), construido en 1954, tiene una capacidad de embalse de 11 hm3. Se nutre de los ríos Guadiana y Aljucén. Su característica hídrica es que tiene mayor nivel de agua en verano que en invierno.
Situada la presa al oeste de Mérida, el embalse penetra en la ciudad, formando un pulmón verde.
Su función es regular y derivar el agua por dos canales que discurren a ambos lados del Guadiana: el canal de Montijo, por la margen derecha, y el de Lobón por la izquierda. Ambos nacen en la presa de Montijo, y ambos finalizan su recorrido, ya como pequeñas acequias, en el término municipal de Badajoz. Entre ambos canales abastecen a casi 1.200 kilómetros de acequias.
Aunque realmente empecé la ruta de visitas por el poblado de Lácara, a efectos expositivos iniciaré el relato por Valdelacalzada dado que se trata del primer poblado construido en 1948, antes de la promulgación del Plan Badajoz, y que sirvió de modelo de referencia para la prosecución de la construcción de los poblados del Plan.
Valdelacalzada
Valdelacalzada (1) es municipio y el mayor pueblo de colonización de esta zona, con 2.734 habitantes en 2018, con población creciente frente a los 2.582 del año 2000.
Para esta presentación me serviré del contenido explicativo que se encuentra en la Plaza de España y que creo que es un resumen que sirve de base para una primera interpretación general de lo que fueron y representaron estos poblados de colonización.
Los orígenes de Valdelacalzada se remontan a finales de 1948. Fue el primer pueblo de colonización, proyecto piloto de todo el Plan Badajoz, por lo que su fisonomía arquitectónica adelantaba ya el estilo constructivo de los pueblos de colonización.
El motor generador del urbanismo de Valdelacalzada, se constituye a través de la proyección de su Centro Cívico como auténtico núcleo neurálgico de la vida política, económica, social y cultural en el desarrollo del pueblo, en él aparecerán las dotaciones institucionales a la cabeza de la trama urbana como elementos reconocibles y de valor simbólico, en un intento de crear una escenografía que en aquellos tiempos identificaba lo Patrio, una arquitectura experta en espacios nacionales como representación de la voluntad de propaganda del Régimen instaurado tras la Guerra Civil. La plaza de España, adquiere carácter significativo y gran poder estructurante, cualidades que se consiguen por un lado al proporcionarle una mayor dimensión a este elemento urbanístico y, por otro lado, al dotarlo de apertura y libertad de diseño en la implantación de las diferentes edificaciones singulares que lo acompañan.
La planta de la plaza se trazó siguiendo aristas geométricas sin llegar a ser una cuadrícula exacta, por eso mismo la Plaza tiene un cierto regusto antiguo, como si el transcurso del tiempo hubiera dibujado al azar dicho perímetro. Se trata pues, de un gran Centro Cívico desde el cual se proyectan cuatro supermanzanas generadas por dos vías principales perpendiculares Norte-Sur y Este-Oeste, que sitúan a la Plaza de España en el centro local. Estos dos ejes hipodámicos recuerdan los trazados ordenados históricamente por los romanos (Cardus – Decumanus) en sus ciudades, que en el caso de Valdelacalzada, pudieron ser recuperados posiblemente por ser el primer núcleo construido por el Plan Badajoz en un claro guiño histórico por el paso de la Calzada Romana en la población.
Dentro del Centro Cívico, podemos distinguir diferentes arquitecturas y espacios públicos de clara tendencia pintoresquista tradicional:
Plaza central: Concebida como un espacio libre con carácter neurálgico e importante por su configuración, condiciona y participa del trazado generador principal urbano. En ella se desarrolla una acertada labor de paisajismo ambiental a través de una composición ordenada de especies vegetales.
Ayuntamiento: Representa el Orden Civil, el edificio posee un lenguaje arquitectónico funcional, destacando la triple arcada de acceso completada en la parte superior con el Balcón Consistorial, anexado está el Torreón vertical, manifestando así su condición emblemática respecto al resto del caserío. A Ambos lados de él, se ubicaron las casas de los profesionales como el médico, maestros, secretario y perito agrícola.
Iglesia: Rompiendo con el perfil uniforme del pueblo, constituye el hito arquitectónico más reconocible y singular. Destaca su línea que se acerca al pintoresquismo tradicional de la época. Tanto en su concepción como en su ejecución, se reflejan unas pautas marcadas por la austeridad, dándole al conjunto una sencillez compositiva.
Artesanías: Ubicadas en la gran arcada de soportales de bóveda ojival que se disponen sobre el poniente de la Plaza de España hasta el sur formando una “L” que se dispone anexa desde la Iglesia Parroquial, creando así un elemento arquitectónico singular muy adecuado que articula y ordena el Centro Cívico.
En la actualidad la plaza de España acoge el Homenaje al Colono, que como veré en otros pueblos, se prodigaron con motivo del cincuentenario de su creación.
La trama urbana es racional, con calles anchas, con combinación de casas de una y dos plantas, adosadas formando manzanas.
Atendiendo a que todas las casas estaban destinadas a familias de productores agrarios debían contar con vivienda y corral para animales y aperos, con lo que debían contar una puerta de acceso a la vivienda y con un portalón.
Los dos modelos dominantes de distribución fueron con el portalón en la pared de la entrada, o el portalón en la parte posterior, o en un lateral si eran esquineras.
En Valdelacalzada es dominante el modelo de portalón posterior, creándose calles de dos tipologías. Una calle en la que se encuentran las puertas de las viviendas, encaradas a los dos lados de la calle, y una calle en la que solo se encuentran los portalones, también encarados los de dos manzanas.
Un ejemplo de tipología de casa de una planta con puertas de acceso por delante y detrás.
El siguiente es un ejemplo de casa de dos alturas con las puestas sobre la misma fachada. Desconozco si corresponden a la misma fase de ejecución del poblado.
Guadiana del Caudillo
Guadiana del Caudillo (2). También municipio, con 2.518 habitantes en 2018 frente a 2.452 en 2000. Fue creada en el año 1950. Es el segundo mayor poblado de la zona.
No visitado.
De la visualización del trazado urbano destaca la forma casi rectangular de su perímetro y el trazado ortogonal, con dos ejes principales norte-sur y este-oeste, con epicentro en la Plaza Mayor, que actúa de centro cívico con el Ayuntamiento, la Iglesia y la Casa de Cultura.
Pueblonuevo del Guadiana
Pueblonuevo del Guadiana (3). También municipio, con 2.033 habitantes en 2018 y 1.942 en el año 2000. Se comenzó su construcción en 1948, inaugurándose en 1956.
La actividad agrícola en esta zona se basa fundamentalmente en el cultivo de árboles frutales.
El trazado urbano muestra ciertas particularidades. El perímetro inicial era pentagonal resultado de una trama parcialmente radial. El perímetro actual es casi cuadrado. Todo él con manzanas ortogonales, excepto las que deben adaptarse a la forma curvilínea del trazado radial.
Lo más particular es que el centro cívico no se concentra en una plaza, sino que se desarrolla sobre un ancho paseo curvilíneo que une la plaza de la Iglesia con la Plaza del Ayuntamiento, mientras que los espacios sociales se situaban en los dos lados de la zona oeste.
La adecuación ortogonal de las manzanas a la prolongación de los dos extremos del arco hace que el resultado final sea una forma mixta de un trazado radial parcial al que se sobrepone un trazado ortogonal de las manzanas.
El plano señala en color el poblado inicial.
Como en algún otro poblado, lo que se considera la entrada al pueblo se efectúa a través de un arco.
El primer tramo rectilíneo de la calle de entrada lleva a la Plaza de la Iglesia, de donde parte el paseo en arco que llevará a la Plaza Mayor, sede del Ayuntamiento.
La impresión que recibí fue que al Ayuntamiento no se le había dado un carácter simbólico potente, al situarlo en una esquina de la Plaza Mayor, incluso con menor presencia que el edificio colindante.
Por su parte, la Iglesia Parroquial de Cristo Rey, en el otro extremo del paseo, se convertía en un edificio más significativo, con una alta torre, casi desmesurada.
En su conjunto, sus blancas edificaciones y casas mantienen la arquitectura propia de colonización, la racionalidad en su diseño.
Encuentro nuevamente la combinación de casas de una planta y de dos plantas, más o menos intercaladas, que rompen la monotonía, con las dos puertas, a la vivienda y al corral.
Un modelo no usual de fachada continua de dos niveles que confiere un aire más “urbano” al conjunto.
Un portalón abierto me permite husmear en un antiguo corral.
Les gusta recordar que la zona estuvo intensamente ocupada en época romana, en forma de villas y explotaciones agro ganaderas que se extendieron junto al río Guadiana a lo largo de la vía que unía Emérita Augusta (Mérida) con Olisipo (Lisboa). En el margen derecho del Guadiana se encuentra la Villa Romana de Pesquero.
Alcazaba
El siguiente poblado de colonización, este no visitado, sería Alcazaba (4), perteneciente al municipio de Badajoz. Es uno de los poblados más pequeños, con 240 habitantes en 2018, habiendo perdido población respecto a los 260 del 2000. El año de fundación fue 1958.
De estructura ortogonal, la imagen parece mostrar que una parte importante de las casas disponían de una amplia zona para huerto en la parte posterior.
Novelda del Guadiana
Novelda del Guadiana (5), también incluido dentro del municipio de Badajoz. De dimensión intermedia y sostenida con 922 habitantes en 2018 y 924 en el 2000.
Según consta en una lápida conmemorativa en homenaje a los primeros ocupantes, Novelda del Guadiana se fundó en 1956, constando 90 colonos como fundadores, con sus nombres.
En este caso el planeamiento urbano es claramente radial sobre el eje de la calle Calzada. Con la torre del agua a la izquierda.
Se aprecia claramente la curvatura de las calles del arco inicial.
El modelo aplicado al centro cívico fue el de articular los dos centros de poder, el civil y el religioso, en los extremos de un paseo.
Aun cuando no es municipio un edificio que cumple las funciones subsidiarias preside la Plaza Mayor.
Es una plaza viva, donde se reúne cada día el “parlamento”, como lo llaman sus habitantes.
Mientras que la Iglesia parroquial de Santa María Magdalena, tiene su poder simbólico como cabecera del paseo.
Como puede apreciarse en la fotografía anterior, las iglesias blanqueadas requieren un mantenimiento constante si no se quiere que muestren un aspecto de abandono.
Las casas, con modelos arquitectónicos más o menos diferenciados, mantienen el doble modelo de una o dos plantas.
En este poblado se optó en muchas zonas por destinar una calle a los accesos a las viviendas, y la calle posterior para que accediesen a los portalones las manzanas de cada lado.
En la fotografía la calle posterior de la casa de la fotografía anterior.
Sagrajas
No visitado. Sagrajas (6), perteneciente al municipio de Badajoz, Es un poblado pequeño con 580 habitantes en 2018 frente a los 601 del año 2000. Comienza a ser poblado en 1956.
De la imagen aérea se desprenden dos características. Morfología urbana ortogonal con una pequeña zona de modelo radial. No hay un centro cívico, ya que la Iglesia no se vincula con la Plaza Mayor.
Valdebótoa
Sin visitar. Valdebótoa (7) pertenece al municipio de Badajoz. De tamaño media, con 1.347 habitantes en 2018 y 1.206 en 2000. Es un poblado del año 1958.
La morfología urbana está formada por dos unidades. Una ortogonal al norte y otra de reminiscencias radiales unidas por una gran plaza.
Gévora
No visitado. Gévora (8), perteneciente al municipio de Badajoz. Población de 2.482 habitantes en 2018, frente a los 1.589 del año 2000. Creada en el año 1956.
Se encuentra a 10 minutos del centro de Badajoz por lo que, según parece, se está convirtiendo en zona residencial de Badajoz, lo que explica las nuevas promociones que se están efectuando y el consiguiente incremento de población.
En Gévora hemos llegado al límite occidental del Plan Badajoz.
A partir de este momento para continuar la ruta pasaré al lado izquierdo del Guadiana y me dirigiré hacia levante. El primer poblado será Villafranco del Guadiana.
Villafranco del Guadiana
Villafranco del Guadiana (9), perteneciente al municipio de Badajoz. 1,509 habitantes en 2018 y 1,344 en 2000.
El poblado del Plan Badajoz se construyó en 1958, según consta en el monumento conmemorativo de los 50 años de su fundación, ocupando la zona norte. Un gran paseo, la Avenida de los Colonos, la separa de una fase de construcción posterior.
La morfología urbana de la primera fase es un rectángulo perfecto de estructura ortogonal. La segunda presenta forma de trapecio, también de organización ortogonal.
A diferencia de los demás vistos hasta ahora, una gran zona industrial, de casi un tercio de la extensión del poblado, se sitúa en el lado este.
Las casas del primer asentamiento siguen el modelo de la forma predominante en los poblados originales. Muchas son casas de doble planta con la entrada al corral en la fachada de entrada. Muchas de ellas dispuestas de forma simétrica, adosados los cuerpos de la construcción.
Al otro lado del paseo, la fase de construcción posterior, de casas de una sola planta, presentan un aspecto más “de chalet”, aunque también con portalón que da más la impresión de acceso a un patio que a un corral.
Tampoco aquí la Iglesia y la Plaza de España, con el edificio calificado de Ayuntamiento, no forman un centro cívico integrado, sino que junto a las instalaciones deportivas se organizan a lo largo de tres manzanas.
La sensación que obtuve fue la de un urbanismo confuso en la parte central. Primero la Plaza de España con el monumento a los primeros pobladores.
A continuación, otra plaza medio conexa, con el edificio de las oficinas municipales.
Le sigue un conjunto de edificios de servicios con unos porches, con servicios y viviendas, por la parte posterior que conducen a una escondida puerta de acceso a la Iglesia.
El ábside de la Iglesia sobre otra plaza, en la que en un lateral y exenta, se sitúa una estructura de campanario.
La manzana siguiente alberga las instalaciones deportivas.
La Iglesia parroquial de Nuestra Señora del Socorro está formada por una nave, con un ábside en forma de triángulo, con unos murales de mosaico a cada lado. En el lado del evangelio una cristalera de colores traslucidos y violáceos a todo lo largo aporta la iluminación.
Una particularidad que no he visto en ningún otro poblado son calles estrechas, sin circulación rodada, con viviendas sin portalón, que especulo que sean viviendas para jornaleros.
Por último, una imponente torre del agua constituye el elemento visual dominante.
Balboa
Me dirijo ahora a Balboa (10), continuando dentro del municipio de Badajoz. Se trata de una localidad pequeña, con 535 habitantes en 2018 que han disminuido frente a los 604 del año 2000.
Un mosaico conmemorativo establece el 28 de mayo de 1958 como fecha inicial. En él se recuerdan las procedencias de los primeros colonos: Aceuchal, Alburquerque, Azuaga, Badajoz, Cordobilla de Lácara, Esparragosa de Lares, Fregenal de la Sierra, Malcocinado, Puebla de Sancho Pérez, San Vicente de Alcántara, Santa Marta, Talavera la Real, Trasierra y Villar del Rey.
En una placa con un poema conmemorativo de los cincuenta años de su fundación se dice:
“Desde lugares distintos
llegaron a estas tierras
nuestros primeros vecinos
con sus carros y carretas;
fueron principios muy duros,
tiempos de hambre y carencia
pero al extremeño rudo
no hay quien su voluntad tuerza.”
Lo que me sitúa una vez más en la dureza de las condiciones iniciales en las que se encontraron los primeros colonos, desplazados al lugar sin que estuviesen acabados ni viviendas ni infraestructuras.
La morfología responde al modelo rectangular con urbanización ortogonal.
En este caso se articula un claro centro cívico, en el centro del lateral norte. Una plaza cerrada de soportales, con la Iglesia de Nuestra Señora de las Nieves como centro dominante, mientras que el edificio municipal se sitúa en el lateral izquierdo.
Se alternan casas de una y dos plantas, aunque tengo la impresión de que muchas de las de una planta no tienen portalón ni corral.
También se visualiza una mayor dispersión de modelos de casa, a lo que no se si puede haber contribuido remodelaciones posteriores, porque en la vista aérea se observa la presencia de muchas piscinas particulares.
Tener en cuenta que la carretera de acceso enlaza con la entrada del aeropuerto de Badajoz, a 1 kilómetro de distancia, y a 20 minutos de Badajoz.
Alvarado
El siguiente poblado de colonización, que no visité, será Alvarado (12), perteneciente todavía al municipio de Badajoz. Es un poblado pequeño, con 321 habitantes en 2018 por encima de los 265 del año 2000. Se halla situado desplazado hacia el sur.
La morfología urbana responde al modelo ortogonal rectangular, con unas pequeñas curvaturas en la zona sudoeste.
En las proximidades se hallan localizada una planta fotovoltaica y otra termo solar. Podemos comparar sus extensiones con las dimensiones del pueblo.
Guadajira
Guadajira (13) pertenece al municipio de Lobón. Es uno de los poblados pequeños con 526 habitantes en 2018 y 554 en el año 2000.
Un cartel informativo nos ayuda a conocer algo de la historia de la población de Guadajira, como otro de esos pequeños núcleos rurales denominados de colonización, integrado en el Plan Badajoz, en la década de los años cuarenta.
Como ya hemos visto en otros pueblos, el territorio muestra signos de gran antigüedad en su ocupación, por lo menos desde la Edad del Bronce, con especial énfasis en el período de la romanización.
A este pueblo llegaron familias procedentes de Higuera de la Serena, Valdelacalzada, La Morera, La Haba, Carmonita, Azuaga y Granada.
Dada la inexistencia de infraestructuras, algunos de estos primeros colonos se instalaron en pequeños barracones o incluso chozas provisionales junto al río Guadiana en espera de obtener una vivienda.
Una vez instaladas las familias de colonos se les adjudicaba un lote compuesto por la llave de la vivienda, una parcela, una vaca y una yegua.
Asentada sobre los terrenos de la antigua finca “El Cotorrillo” se alza sobre una especie de serrata aislada en su extremo occidental y que comienza en los altos de Lobón paralela al río Guadiana. Es el único pueblo de los presentados que no se localiza en un llano, sino en una pequeña colina.
Me encuentro en el único poblado con morfología urbana totalmente radial y semicircular. Ello obedece a haber buscado la forma de adaptación a la morfología de un cerro, donde el trazado circular se adecúa a las líneas de nivel del terreno. En color la primera fase de construcción.
Las casas presentan el doble modelo de casa de una y de dos plantas, así como de portalón en la fachada o en la parte posterior o lateral si es esquinera.
La casa con portalón posterior llevó a la forma de calles solo con portalones.
Ubicar la Iglesia en el cerro llevó a situar el centro cívico alrededor del edificio para Ayuntamiento. Esta es una construcción de dos plantas proyectado en 1955, con remodelaciones posteriores.
Iglesia Parroquial de San José Obrero, como todas las de estos poblados, es de líneas simples con los muros pintados de blanco, al igual que el campanario, lo que demanda un constante mantenimiento. Un primer campanario más bajo fue sustituido por el actual mucho más alto para dar más visibilidad desde el exterior.
Situada en el centro del semicírculo, ocupando la parte más elevada.
Barbaño
Pasamos a la margen derecha del Guadiana donde se situa Barbaño (13), perteneciente al municipio de Montijo, Es un poblad0 pequeño, con 657 habitantes en 2018 y 543 en 2000. Su construcción corresponde a 1956.
No lo visité. En la imagen aérea se observa una forma particular de morfología urbana en forma de estrella.
Lácara
Finalizo esta presentación en Lácara (14), pedanía de Montijo. Es el poblado más pequeño de los de esta zona, con 227 habitantes en 2018 por debajo de los 249 del año 2000.
De estructura ortogonal y perímetro casi rectangular, con una gran plaza que parece sobredimensionada para las dimensiones totales del pueblo.
El centro cívico se organiza en la gran ya céntrica Plaza de España.
En un lateral el edificio destinado a ayuntamiento.
Sobresale la Iglesia parroquial de San José Obrero, nombre muy de la época nacional-católica.
El campanario sigue el modelo de sobredimensionamiento en su altura.
Edificio racionalista con elementos de modernidad para la época.
El estado exterior de la Iglesia evidencia las necesidades de mantenimiento de los materiales usados en todas las iglesias del Plan.
En cuanto a las formas de edificación de las casas se sigue los modelos de casas de una y de dos plantas con corral y portalón, siempre adosadas formando manzanas.
En este conjunto de tres casas, en que algunos dueños han decidido romper con el color blanco, se ve claramente la disposición de entrada a la vivienda y portalón en la misma fachada.
También se observan una isla de casas con patio, pero sin portalón y corral, que ya he presupuesto con anterioridad que podrían corresponder a casas para jornaleros, pero sin confirmar.
Cabe suponer que este fue el caño y abrevadero, frente a la planicie por la que se extienden los regadíos del Plan Badajoz.
Fin de la salida
Sobre las reticencias de ser una obra del franquismo se acepta que en general fue una obra positiva, evidentemente con sus” luces y sombras”, o el “cuento de la lechera con final … feliz”.
La realidad actual parece ser que es la zona de Extremadura con mayor nivel de renta agraria en la actualidad.
Yo solo me he movido por la epidermis del fenómeno, por lo que todavía resta visible, pero sin demasiados instrumentos de interpretación.
Un reto para una promoción turística de esta parte de la historia territorial sería la de establecer un “plan de interpretación” que ayudase al turista a valorar los elementos significativos de estos poblados que hagan más rica e interesante la visita. Así se podría fomentar el potencial turístico de una cultura territorial con personalidad.
Bases de información
Academics
C. Romero Cuadrado, Aspectos económicos ligados a las explotaciones creadas por el Plan Badajoz (Tesis Doctoral)
J.I. Sánchez Sánchez-Mora. El proceso de colonización en Extremadura (1952 – 1975): sus luces y sus sombras
Ch. Álvarez Rodríguez. Las colonas del Plan Badajoz y la memoria de la doble explotación
J. Rodríguez Pastor. Los pueblos nuevos de la cuenca extremeña del Guadiana (España): ¿Pueblos sin identidad?
F. López Santamaría. El «Plan Badajoz». Antecedentes, contenido y ensayo de sus efectos
E. Abujeta. Los pueblos de colonización de Extremadura. Evolución y estado, medio siglo después de su construcción
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Enlace con el Post: Pueblos de Colonización Agraria de Los Monegros (Huesca/Zaragoza)
