Priego de Córdoba, en la Subbética Cordobesa, es una ciudad bella, agradable y llena de interés, y un centro importante del barroco andaluz. Además, tierra de aceite entre los mejores del Mundo.
Priego de Córdoba (Córdoba)

Priego de Córdoba, La Subbética, Córdoba
Priego de Córdoba. Comarca: La Subbética. Provincia: Córdoba. Com. Autónoma: Andalucía
Coordenadas: 37°26′18″N 4°11′53″O. Altitud: 652 msnm. Población: En Priego 18.889 Habitantes; en el municipio 22.585 habitantes, repartidos en el territorio en 8 aldeas y 17 núcleos diseminados (2018)
Web: Ayuntamiento
Bien de Interés Cultural como Conjunto Histórico-Artístico (1972)
Visita: 2018

Índice
Priego de Córdoba, La Subbética, Córdoba
En mi estancia en la Hospedería La Era de Almedinilla, una de las salidas me permitió visitar Priego de Córdoba. Pasear por esta ciudad de la Subbética fue un placer altamente recomendable.
Me encuentro en lo que se considera una ciudad media andaluza, bella, agradable y llena de interés, además de centro del barroco andaluz.
En su estructura urbana se observa cómo una gran parte de la ciudad se corresponde con la ocupación histórica hasta principios del siglo XX, y otra de posterior desarrollo, perfectamente diferenciadas.
El territorio
Priego de Córdoba está situada sobre una meseta elevada a unos 650 metros de altitud, dominando la fértil Vega del río Salado, cerrada por las diversas estribaciones de las Sierras Subbéticas, donde el Parque Natural de las Sierras Subbéticas hace de telón de fondo territorial por el lado oeste de la ciudad.

Esta orografía de conjunto fue la que ejerció un importante papel en la consolidación de la frontera entre el Reino Nazarí y el de Castilla entre los siglos XIII y XV.
Un poco de historia
Ubicada en pleno centro geográfico de la Ruta del Califato, Priego de Córdoba se impone al paisaje en un emplazamiento que durante siglos le ha otorgado un importante papel estratégico.
Este territorio ha estado ocupado por el hombre desde la antigüedad y se reconocen asentamientos iberos, así como el asentamiento de romanos.
Pero lo que ha dejado huella en la ciudad hasta la actualidad fue el establecimiento de los árabes a partir del siglo VIII.
Hacia 863, Bagub aparece citada como lugar significativo que contribuyo en las campañas militares del emir Muhammad I, como capital de una Cora. En 889 juega un papel importante en la rebelión del muladí Ibn Hafsun siendo el centro de operaciones de Ibn Mastana, uno de sus aliados.
A pesar de haber reforzado sus defensas, el 1225 Fernando III se apodera de Bagub en el transcurso de sus campañas por el Guadalquivir y la cede a la Orden de Calatrava para su protección y defensa, y como centro estratégico en la presión sobre los musulmanes.
Como sucedió en el resto de la zona, volvió a manos de los nazaríes en 1327.
En 1340 Alfonso XI la gana definitivamente, repoblando el lugar y reforzando su perímetro amurallado.

Desde 1370 Priego se integra en el patrimonio de la casa de Aguilar. En 1502, don Pedro Fernández de Córdoba es nombrado marqués de Priego, inaugurando una etapa de progreso con la construcción de la Casa Del Cabildo, la cárcel, el Pósito, las Carnicerías y la iglesia de San Esteban, hoy conocida como San Francisco.
El siglo XVII se ve afectado por la crisis general del Reino, y ya en el siglo XVIII cobra especial relevancia debido a la notoria expansión de la industria de la seda, produciendo tafetán y terciopelo.
El periodo de expansión del siglo XVIII se refleja en la presencia del Barroco, encabezado por Francisco Hurtado Izquierdo uno de los artistas más destacados del barroco español.
A finales de siglo la industria textil entra en decadencia por problemas en la producción de morera y por la competencia de los tejidos de algodón ingleses y catalanes.
A pesar de los avatares políticos y bélicos del siglo XIX, la población crece hasta los 27.000 habitantes y la industria textil se recupera hasta mediados del siglo XX. Reconvertida actualmente en industria de la confección.
La agricultura ha sido, desde siempre, la base económica más importante, especializada en la actualidad alrededor del olivo y el aceite, alcanzando un grado de calidad máxima a nivel mundial a través de la Denominación de Origen Protegida “Priego de Córdoba”.
El máximo de población en el municipio se registra en 1950, con 27.093 habitantes. Hasta principios de los años 80 sufre los efectos de la emigración general de la zona, con un mínimo de 19.485 habitantes en 1981. Desde ese año se produce una ligera recuperación. Los 22.585 de 2018 siguen una tendencia ligeramente decreciente en esta última década.
Urbanísticamente, la trama viaria en general es irregular adaptándose a las diferencias de cotas del terreno, destacando el trazado del Barrio de la Villa de origen musulmán y medieval. Este trazado es de calles estrechas y tortuosas, y una parcelación que suele dar divisiones de formación estrecha y profunda, con patio o corralón de parcela. Manzanas de mayor tamaño en los desarrollos de los siglos XVII al XIX, con calles algo más anchas.
Visita a Priego de Córdoba

Al irme acercando a Priego voy constatando la importancia de la posición del lugar y de la ciudad, con la zona más antigua asentada sobre el borde de una meseta, y la zona de expansión posterior avanzado sobre el lado altiplano.

Al llegar a Priego busco la calle Carrera de la Monjas, en el centro, para encontrar, en el punto de bifurcación de la calle, a la derecha, el aparcamiento (PK).
Biblioteca Pública Municipal y Calle de Cervantes
El primer contacto con sus calles se produce en pleno ensanche ante el moderno edificio Palenque, destinado a la Biblioteca Pública de Priego.

Desde este punto parte la calle Cervantes, calle de casas del siglo XX sin ninguna personalidad, como corresponde a la arquitectura banal de esta época en toda España. Me conducirá hasta la Fuente del Rey.
Fuente del Rey y Fuente de la Salud
Al llegar a la plaza de la Fuente del Rey, los edificios de la plaza adoptan el aire decimonónico de esta parte de Priego.

Los elementos sobresalientes son la Fuente del Rey y la Fuente de la Salud (1).
La Fuente del Rey, declarada Monumento Nacional, en el centro de la plaza, se concibe con tres estanques de distinto nivel y forma alargada en la que predominan los contornos curvos.
La particularidad de mi visita es que en ese momento en la Fuente del Rey se estaban realizando trabajos de mantenimiento, por lo que, en vez de agua, pude ver obreros trabajando en el interior del estanque. Serán unas imágenes originales.

Tras sucesivas transformaciones desde el siglo XVI, fue terminada de construir a principios del siglo XIX. Diseñada en estilo barroco por Remigio del Mármol, se fecha su terminación en 1803.

En el estanque central se dispone una escultura de Neptuno y Anfítrite que cabalgan sobre un carro tirado por caballos que salen del agua.


Detrás de la parte cabecera de la Fuente del Rey se halla la Fuente de la Salud, del siglo XVI. Es el punto de nacimiento del manantial que abastecía de agua a la población. El frontispicio se atribuye a Francisco del Castillo, de clara influencia manierista italiana.

Calle del Rio
Desde esta plaza parte una calle sinuosa, la calle del Río, hacia el centro de la ciudad. Su trazado sinuoso obedece a que seguía el cauce del río, ahora canalizado subterráneamente bajo la calle.
La calle del Río, junto a las calles Carrera de Álvarez y Carrera de las Monjas, son de mayor anchura y vienen marcadas de un carácter señorial determinado por el estilo de las casas palaciegas que las conforman, especialmente del siglo XIX.
La llegada de un grupo de visitantes animó el lugar.



Casa de la Cultura
Un gran edificio en ladrillo rojo en el lado izquierdo acoge la Casa de la Cultura. Biblioteca, Conservatorio y el Centro de Profesorado CEP (2)

Iglesia del Carmen
En la esquina de enfrente se levanta la Parroquia Nuestra Señora del Carmen (3).

Reedificada en estilo barroco en el siglo XVIII, es fruto de la transición al neoclásico. Su fachada fue terminada en 1790 y está coronada por una torre con cúpula que remata una imagen del profeta Elías. Fue declarada Monumento Nacional.


La calle continúa mostrando la potencia de sus edificios señoriales.

Casa-Museo Niceto Alcalá-Zamora
Unos metros más adelante, en la misma acera, en el número 33 se encuentra la Casa natal de Niceto Alcalá Zamora (1877- 1949) (4), primer presidente de la II República española, uno de los hijos más apreciados de Priego.
La casa señorial es de finales del siglo XIX. En la actualidad alberga la Casa Museo y Patronato Municipal Niceto Alcalá-Zamora y Torres.

Otra casa palaciega, en este caso con columnas salomónicas en la portada.

Iglesia de las Angustias
Cerca ya de la plaza de Andalucía, en otra esquina a mano izquierda, se encuentra la Iglesia de las Angustias (5). De estilo rococó, su construcción está fechada en 1773. En la esquina se halla dispuesta una espadaña para una campana.

Plaza de Andalucía, Calle de la Ribera
Al llegar al límite de la calle del Río, a la derecha se encuentra la plaza de Andalucía, de la cual parte la calle de la Ribera que nos adentra en los arrabales antiguos. Dejo de lado la plaza de la Constitución por la que pasaré en el recorrido de regreso.
En seguida aparecerá entre las casas uno de los torreones del Castillo.

"Callejón de la Muralla", Calle Santiago
Tomo el callejón que se ofrece al otro lado de la calle para seguir la muralla del Castillo por el lado oeste.
Detrás del torreón se yergue la Torre del Homenaje.

Huerto de las Infantas
Al llegar a la calle Santiago, al borde de la muralla del Adarve se extiende la Huerta de las Infantas (6). Es un jardín del siglo XVI, que en siglos posteriores llegó a ser un jardín propio del romanticismo, en el que vegetación y juegos de agua eran protagonistas. Ya en el siglo XX, este jardín protagoniza el nacimiento del Festival Internacional de Música, Teatro y Danza.

Pasado el Huerto de las Infantas me enfrento ya con el Barrio de la Villa.

Pero continuo por el exterior de la muralla ya que mi intención es visitar el Castillo.

Una pequeña y cuidada casa se mantiene adosada a la muralla.

Haciendo honor al calificativo de Priego como “ciudad del agua”, por los numerosos manantiales que brotan en la ciudad, a los pies de la muralla aparece uno de ellos.

La muralla fue construida con fábrica de mampostería o sillarejo en la mayor parte de su alzado.
Castillo de Priego
Tras el torreón de la esquina alcanzo ya la puerta del Castillo de Priego (7).




Debe señalarse que el Castillo de Priego es, ante todo, un castillo medieval cristiano (siglos XIII al XV), que ocupa, aproximadamente, el mismo lugar de una alcazaba andalusí anterior (siglos IX al XIII), de la que no quedaban restos emergentes definidos antes de las excavaciones arqueológicas practicadas.
Esta alcazaba, con abundante registro arqueológico, fue destruida o transformada en el período posterior a la conquista cristiana, y dio la forma que presenta el Castillo en la actualidad.
El Castillo de Priego es, en consecuencia, una fortificación de frontera, fuertemente militarizada y condicionada por los avatares que venían marcando las relaciones entre Al-Ándalus y el reino de Castilla y León.
La alcazaba para la ciudad de Priego (madinat Baguh) se construye a finales del siglo X, como residencia del gobernador designado por el califa.
Tras un primer saqueo de la ciudad por Fernando III en 1225, Priego pasa a ser, a mediados del siglo XIII, cabeza de una encomienda de la Orden Militar de Calatrava, que construye la importante Torre del Homenaje, uno de los aljibes, y la casi totalidad de los lienzos de muralla que presentan un aparejo de mampostería de piedra caliza gris.
Tras la conquista definitiva de Priego por Alfonso XI en 1341, se incorpora al señorío de la casa de Aguilar, de los Fernández de Córdoba (1370-1501). A este período corresponde la mayor parte de los lienzos de murallas y torres conservados, si bien no todos son contemporáneos. Se han identificado elementos del último tercio del siglo XIV (torres del Frente suroeste, por ejemplo) de la primera mitad del siglo XV (frente torreado orientado a la plaza de El Llano) y de la segunda mitad y finales de este mismo siglo (reformas y acondicionamientos artilleros principalmente).
La importancia de este puesto fortificado se pone de manifiesto en que, a mediados del siglo XV (1441-1442), la guarnición de Priego estaba formada por 34 caballeros, 145 Ballesteros, 175 lanceros, y la población total se estimaba en 1.500 habitantes.
Los elementos conservados más importantes del Castillo medieval son los lienzos de murallas con diversas defensas y accesos, ocho torres de flanqueo, una torre del homenaje y dos aljibes, así como un importante número de distintas dependencias y estructuras mal conservadas, aunque con registro arqueológico, y las edificaciones y modificaciones incorporadas en época moderna y contemporánea.
En las fotografías del epígrafe anterior ya he mostrado los lienzos externos y diversas torres de flanqueo.
Tras cruzar la puerta de entrada, en la actualidad se accede a una gran explanada que correspondería al patio de armas.

El elemento dominante que se observa es la Torre del Homenaje.

La primera parte de la visita la efectuaré siguiendo gran parte del adarve a lo largo de la muralla, y entrando en las torres que se cruzan a su paso. Y después visitarle la Torre del Homenaje.
En ambos recorridos un elemento espectacular será observar el entorno que se domina desde estas alturas.
Unas escaleras bien acondicionadas permiten el acceso al adarve para seguir la muralla noreste y la sudeste con sus tres torreones.

Solo llegar a lo alto y ya se nos ofrece una imagen sobre el Barrio de la Villa, con la Iglesia de la Asunción. Abajo la calle Santiago por la que he pasado antes de entrar, con el manantial al fondo a la derecha.

El grosor de la muralla permite un camino de ronda amplio que lleva a la torre cuadrada del vértice más al este del conjunto.


Atravieso el interior del torreón.

Me encamino al torreón central, en el que es posible ascender por una escalera interior de piedra hasta la terraza superior.



Desde estas alturas los soldados debían sentirse inexpugnables.

Termina aquí la zona visitable de este lado del adarve. La zona sudoeste de la muralla se halla integrada en el espacio urbano con casas adosadas a ella.

Desciendo de nuevo hasta la Plaza de Armas para acceder a la Torre del Homenaje.
En el trayecto paso junto a ejemplares de bola de cañón (bolaño).

La Torre del Homenaje esta situada descentrada hacia el oeste del recinto. Es de planta rectangular y mide unos 30 metros de altura, construida en el siglo XIII cuando estaba en manos de la Orden de Calatrava.
Es Monumento Histórico-Artístico Nacional desde 1943.

El interior está formado por tres plantas cubiertas con bóvedas de cañón.
Se asciende por el interior hasta la planta superior por una espectacular escalera de caracol.



La planta inferior es un aljibe que se alimenta desde la terraza. La intermedia actuaría de almacén.
La planta superior era empleada como residencia. Cuenta con cuatro ventanas, una en cada vano, ventanales con doble arco de herradura y capiteles nazaríes, lo que hace pensar que fueron añadidos cuando volvió a estar bajo dominio árabe.


En la actualidad, para ascender hasta la azotea de la torre se ha habilitado una escalera metálica.

La azotea permite disfrutar del espectacular dominio visual que ofrece como punto de vigía sobre todo el entorno de Priego.






Además, desde lo alto de la Torre se pueden apreciar llamativas vistas del propio Castillo en su entorno inmediato.



Plaza El Llano, Calle Abad Palomino
Frente a la puerta del Castillo se encuentra la bonita plaza de El Llano.

Me dirijo hacia la izquierda, y esquinera con la calle Abad Palomino, se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
La Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción (8) es un edificio de estilo gótico-mudéjar iniciado en 1525 y terminado hacia 1550. El templo actual responde a una remodelación realizada a mediados del siglo XVIII, que le otorga el carácter barroco que muestra en la actualidad.
La planta es de tipo basilical de tres naves. El elemento más destacable es la capilla exterior anexa en el lado del evangelio, de planta octogonal.



Desde lo alto de la muralla del Castillo ya había tenido ocasión de observar la cubierta mudéjar y el campanario de la Iglesia, de 1541.

Las tres naves del templo se estructuran sobre ocho pilares octogonales.




Preside el altar un retablo del renacimiento tardío montado en 1567.


De entre las capillas que llenan el templo, la más destacada es la Capilla del Sagrario, declarada Bien de Interés Cultural en 1931.
Se llega a ella a través de una cámara rectangular que correspondía a la antigua capilla sacramental, para entrar en un recinto octogonal, construido en la parte exterior del templo en el lado del evangelio. Las obras se desarrollaron a partir de 1772.
La planta octogonal está circundada por un ambulatorio también octogonal. Un segundo cuerpo en alzado corresponde a las tribunas con una baranda continua que sobresale de los pilares. Culmina con una cúpula gallonada.
De los elementos decorativos barrocos desarrollados en los interiores de los edificios, civiles y religiosos, las yeserías fueron las que alcanzaron mayor desarrollo y valor artístico, como refleja ejemplarmente esta Capilla del Sagrario. Esta obra parece atribuible a Francisco Javier Pedrajas. Esta yesería es de claro estilo rococó.
El tabernáculo central es obra del escultor Manuel Gamelo de 1921.





Entre las restantes capillas se distingue la Capilla Bautismal o de San Miguel.

También la capilla de Nuestra Señora de los Dolores, con un altar barroco.

Un pequeño Museo muestra objetos litúrgicos y de platería desde el siglo XVI.


Barrio de la Villa. Calle Jazmines y Calle Bajondillo
Salgo del templo y me adentro por el Barrio de la Villa. Este conjunto fue catalogado como Monumento Histórico Artístico en 1972. Inicio el trayecto por la calle Jazmines, en el lateral izquierdo de la Iglesia.
El actual Barrio de la Villa se corresponde aproximadamente con la ciudad andalusí intramuros (siglos VIII-XIV). Este espacio quedaba protegido por las murallas islámicas, delimitado por el Tajo del Adarve, el Castillo, la Puerta de Santa Ana y el Paseo de Colombia.
La Villa bajomedieval cristiana (siglos XIV-XV) se asentó sobre la ciudad andalusí, y parte de los arrabales andalusíes extramuros.
De inspiración claramente medieval y musulmana, es hermano de los barrios andaluces más típicos, como el Albaicín granadino o la Judería de Córdoba.
Sus calles son sinuosas, blancas y estrechas y con corralones, en una agradable armonía de flores, sosiego y cal.

No pueden faltar las hornacinas, ni las paredes perfectamente encaladas.



Algunas calles sin salida conducen a corralones.


Al fondo de la calle se vislumbra la vega del rio Salado.

Balcón del Adarve
La calle Bajondillo me conduce al Balcón del Adarve (9). Este delimita el Barrio de la Villa, conformando el límite natural del corte sobre la vega, permitiendo la admiración del paisaje que lo rodea.
Es el elemento urbano que mejor define la disposición de la ciudad en su paisaje inmediato. Entendido como muralla histórica de la población, consta de dos elementos claramente diferenciados: el cortado geológico de travertino y el recinto murado.


Desde donde se percibe mejor su papel defensivo es visualizándolo desde el exterior.
Al acercarme a Priego de Córdoba, la visión del Adarve ya me había permitido constatar todo su sentido de fortificación dominante

En su forma de paseo-mirador actual se asienta sobre la antigua muralla, donde destacan los dos torreones medievales acondicionados como miradores, construidos con un perfecto despiece de sillería (siglos XIV-XV).
Desde aquí se dispone de magníficas vistas sobre el valle del río Salado y del conjunto de la Subbética, haciéndose patente la omnipresencia del olivar.



Paseo de Colombia
El mirador hacia el sur conduce al Paseo de Colombia, conjunto de jardines y fuentes que circundan el monumento al Obispo Caballero y Góngora, Virrey de Nueva Granada.


Prosigo por el final del paseo de Colombia, para girar a la derecha por la calle Carrera de Álvarez que me lleva, al final de la manzana, a la Iglesia de la Aurora.
Iglesia de la Aurora y San Nicasio Mártir
Sobre los cimientos de una antigua ermita del siglo XV Juan de Dios Santaella y Roldán efectuó una reforma en el siglo XVIII, convirtiéndola en el actual Templo Patronal Ermita de Nuestra Señora de la Aurora y San Nicasio Mártir (10).
En su portada destacan los mármoles, las columnas salomónicas y su espadaña.



En su interior sobresale su exuberante decoración barroca y la yesería. Cuenta con una nave de planta rectangular con 5 tramos jalonados por estatuas de San Pedro, San Pablo y los Evangelistas.



Venera la imagen de la Santísima Virgen de la Aurora, realizada en 1707 en los talleres de los Hermanos Mora de Granada.

Siguiendo todo el lateral derecho de la Iglesia un amplio pasadizo y unas salas albergan objetos relacionados con la devoción de los Hermanos de la Aurora que, todos los sábados del año, a las 12 de la noche, salen desde el siglo XVIII entonando coplas por las calles y plazas de la localidad.

Alberga las sagradas reliquias de San Nicasio mártir, patrón de la ciudad, traídas desde Flandes en 1581 por el Alférez Francisco Márquez.
Desde este punto inicio el recorrido de regreso.
Retrocedo por donde he venido, y sin abandonar la calle, que recibe diversos nombres en el recorrido, llego, a 200 metros, a encararme con las Carnicerías Reales.
Carnicerías Reales
Las Carnicerías Reales (11) eran el matadero y mercado del siglo XVI.
La fachada, flanqueada por dos pequeñas torres, tiene una portada de estilo manierista.

El edificio es de planta cuadrada con patio central, formado por arcadas sobre columnas con torres en sus ángulos y una escalera de piedra en espiral.

Continúo, retrocediendo ligeramente, y a la izquierda entro en la plaza de San Pedro.
Iglesia de San Pedro
En la plaza se sitúa la Iglesia de San Pedro (12), antiguo convento de los alcantarinos. Iglesia concluida en 1690, de estilo barroco-neoclásico.

La portada de piedra se atribuye a Juan de Dios Santaella. En la hornacina superior se encuentra San Francisco de Asís tallado en piedra y policromado.

Presenta una planta de cruz latina y bóveda de medio cañón, una cúpula de media esfera sobre el crucero y varias capillas.



El retablo mayor, realizado por los hermanos Sánchez de Rueda, alberga una bella imagen de la Inmaculada de José de Mora que destaca por su rica policromía.


La Capilla de la Virgen de la Soledad contiene un retablo rococó, atribuido a Francisco Javier Pedrajas.

En la capilla de la Venerable Orden Tercera se halla la imagen del Santo Entierro atribuida a Pablo de Rojas y fechada en 1594.

Al salir de la Iglesia de San Pedro avanzo por la calle Solana, y en el primer desvío ligeramente a la derecha me adentro por la calle de San Juan de Dios para acercarme a la Iglesia del mismo nombre.
Iglesia de San Juan de Dios
La Iglesia de San Juan de Dios (13) formaba parte del hospital de la Orden de San Juan de Dios, fundado en 1637 por Juan de Herrera, terminándose su construcción en 1717.

Está cerrada, por lo que regreso a la calle Solana para acercarme, ahora sí, a la plaza de la Constitución, donde se halla emplazado el edificio del Ayuntamiento.
Plaza de la Constitución, Ayuntamiento
Presidiendo la plaza de la Constitución se encuentra el Ayuntamiento (14), obra moderna construida en 1952, sobre donde antes se hallaba el Convento de Santa Clara.

Carrera de las Monjas
Abordo el último tramo de mi recorrido por Priego de Córdoba. Tomo a la derecha la calle Carrera de las Monjas, que me llevará al aparcamiento.
Iglesia de las Mercedes
En el recorrido por esta calle, una de las tres más amplias e importantes del ensanche, se concentra un buen número de casas señoriales.
Me detendré frente a la Iglesia de Las Mercedes (15), construida en los albores del barroco por Francisco Javier Pedrajas y reformada en 1780 sobre la antigua ermita de San Antonio Abad. La remata dos torres gemelas.

La portada de mármol, de traza neoclásica, fue diseñada por Nicolás Duroni. está catalogada como Monumento Nacional.

El interior sería otro ejemplo de yesería de estilo rococó.
Avanzo por la calle y ya distingo el edificio de la Biblioteca Pública de Priego, por donde había comenzado el recorrido.

Fin de la visita
Llegado al aparcamiento doy por terminada esta mañana en Priego de Córdoba.
Ha sido una estancia intensa, sumamente agradable. La meteorología a acompañado a lo largo de un paseo por una ciudad tranquila y bella en su parte antigua y monumental.
El contacto con el barroco andaluz y la yesería es una experiencia muy particular.
El blanco de las formas recargadas de este barroco-rococó, con su punto de policromía en ciertos momentos, le otorga un aire etéreo y volátil, que lo aleja de lo empalagoso que tiene este estilo en sus manifestaciones más ortodoxas. Esta es la sensación que he obtenido personalmente.
Ni que decir tiene que ha sido una elección absolutamente acertada acudir a Priego de Córdoba como lugar de visita.
Bases de información
Google academic
Ángel Luis Vera Aranda (1993) Aproximación a la evolución urbana de Priego de Córdoba
Angulo Iñiguez (1943) El castillo de Priego de Córdoba
Enlace con el Post: La Era. Almedinilla, La Subbética
En la Carrera de las Monjas, además de la mencionada Iglesia de N. S. de las Mercedes está ubicado el Museo de Lozano Sidro, el cual comparte también edificio con el Museo Arqueológico.
Siempre son bienvenidas las aportaciones. Gracias Rita.